El relleno, también conocido como relleno dérmico o relleno de tejidos blandos, es una sustancia cosmética inyectable que se utiliza para aumentar el volumen, restaurar el contorno y realzar zonas específicas del rostro. Es una sustancia gelatinosa elaborada con diversos materiales, como el ácido hialurónico o la hidroxiapatita de calcio, biocompatibles y compatibles con el cuerpo humano. Al inyectarse en zonas específicas, los rellenos ayudan a reponer el volumen perdido, suavizar arrugas y líneas de expresión, y mejorar la apariencia facial general. Se pueden utilizar para aumentar el volumen de labios, mejillas, mentón, mandíbula y otros rasgos faciales, proporcionando una apariencia más juvenil y rejuvenecida. Los efectos de los rellenos son temporales y suelen durar entre varios meses y un año, dependiendo del tipo de relleno utilizado.